Al año mueren súbitamente 25,000 deportistas jóvenes mientras hacen ejercicio físico. La principal causa de muerte súbita con el ejercicio en deportistas jóvenes es la displasia arritmogénica del ventrículo derecho. Un estudio realizado en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, en Estados Unidos, revela que mutaciones en el gen Desmogleina-2 origina displasia arritmogénica del ventrículo derecho, aumentando las posibilidades de muerte súbita con ejercicio.

La explicación no es muy compleja: la displasia arritmogénica del ventrículo derecho está causada por debilidad o alteraciones en el desmosoma, que es lo que une cada célula del corazón. Cuando los genes que forman el desmosoma cardíaco están alterados (mutados), las uniones celulares son erróneas, con exceso de grasa y causando latidos irregulares, que en algunos casos pueden llegar a la muerte súbita cuando se hace ejercicio. La Desmogleina-2 es un gen involucrado en la formación del desmosoma, por lo que mutaciones en dicho gen pueden desencadenar arritmias mortales.

En el futuro se conocerán más genes involucrados en este mecanismo, lo que hará posible la evaluación genética para conocer si somos propensos o no a padecer alteraciones cardíacas que puedan ocasionar muerte súbita, sobretodo en jóvenes. Si es así, una medicación adecuada e incluso la implantación de un desfibrilador serían recomendados, así como evitar el ejercicio físico intenso.

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